La seguridad de los alimentos viene determinada por múltiples factores. Y uno de esos factores es la temperatura, que es la protagonista de este artículo del blog de Nelsan Alimentaria. En las siguientes líneas, vamos a explicar la influencia de la temperatura en el desarrollo de los microorganismos y cuál es su efecto en los alimentos. De esta manera, comprenderás a la perfección por qué es tan importante llevar un exhaustivo control de temperatura en las cámaras frigoríficas.
Mantener la cadena del frío para la conservación de alimentos
Como expertos en análisis de alimentos, podemos afirmar que la temperatura es uno de los factores que más influye en la conservación de alimentos y que, por ende, ha de ser controlado durante toda la cadena de frío, incluyéndose la conservación en las cámaras frigoríficas. Los microorganismos se desarrollan en general entre los 5º C y 60º C, estableciéndose como temperatura ideal o bien inmejorable los 37º C. En función de este factor, las bacterias se clasifican de la siguiente manera:
- Psicrófilas: la temperatura perfecta para su desarrollo se encuentra entre los 10 y los 15º C.
- Mesófilas: la temperatura perfecta para su desarrollo se encuentra entre los 30 y los 40º C.
- Termófilas: la temperatura perfecta para su desarrollo será mayor a 50º C.
Por lo tanto, está claro que a bajas temperaturas, el desarrollo bacteriano va a quedar prácticamente inhibido.
Requisitos que deben cumplir las cámaras frigoríficas
Los equipos donde se conserven los alimentos juegan un papel importante en la obtención de productos aptos para el consumo. Por lo tanto, es fundamental llevar exhaustivo un control de temperatura en las cámaras frigoríficas. Así como vigilar que cumplan los siguientes requisitos:
- Ser adecuadas para el uso que se les va a dar.
- Tener un tamaño acorde con las necesidades de almacenaje.
- Ser fáciles de limpiar y desinfectar.
- Contar con puertas isotermas, de cierre hermético y un recubrimiento que las proteja.
- Disponer de un sistema de registro de temperaturas.
Gracias a este sistema de registro de temperaturas, se podrá controlar varias veces al días que los grados son los adecuados para la conservación de los alimentos. Eso sí, es conveniente comprobar periódicamente con ayuda de un termómetro accesorio que la temperatura marcada es la correcta. Deberás colocarlo en el punto donde el peligro de tener temperaturas altas sea mayor. Las lecturas, que van a deber efectuarse múltiples veces al día, se anotarán en los pertinentes registros a lo largo del tiempo que se estime oportuno, con la intención de tenerlos registrados en caso que los requieran para las autoridades. Hay que resaltar también, que en los casos de almacenamientos a lo largo de un periodo de más de 8 días, se va a deber contar con de un sistema de registro gráfico de temperaturas.
Control de entradas y salidas de la cámara
Como ya se ha comentado, un funcionamiento deficiente de los equipos de conservación de la temperatura acarreará perturbaciones en los productos y, por consiguiente, una mayor probabilidad de riesgos alimentarios.
A lo largo de todo el almacenaje, la temperatura y la humedad relativa de las cámaras frigoríficas van a deber encontrarse en los límites establecidos conformes los productos guardados; aparte de ser lo más homogéneas posibles, con el fin de sostener unos valores iguales en todas y cada una de las zonas de la cámara. Y para conseguirlo y mantener así la cadena del frío, los movimientos de entrada y salida se harán de forma rápida. En este sentido, el control del flujo entrada-salidas de la cámara se deberá llevar a través de su pertinente registro, anotando datos como la fecha de entrada, la de salida, el tipo almacenaje, los datos de los productos guardados y incidencias que pudiesen suceder, entre otro tipo de información.
Planes de emergencia para la conservación de alimentos
Todos estos controles de las cámaras implican la creación de planes de emergencia, por parte de las compañías, que van a deber realizarse en el caso de averías o problemas que puedan afectar a a la conservación de los alimentos. En estos casos, impedir la alteración de los productos guardados será la prioridad, comunicando esta situación a las personas implicadas. Todas y cada una de las actividades y controles efectuados para garantizar la calidad de los productos acarrearán la creación de registros y documentación que tendrán que estar disponibles para las inspecciones por la parte de las autoridades, que valorarán los procedimientos seguidos por las compañías.
Si deseas conocer más información sobre cómo llevar el control de temperatura en las cámaras frigoríficas, puedes ponerte en contacto con nosotros sin compromiso. Desde Nelsan Alimentaria estamos a tu entera disposición para resolver todas tus dudas en seguridad alimentaria.